Cuando me dieron el alta del hospital, me mandaron realizarme unos análisis de sangre bastante completos y volver en 2 días con el endocrino.
En estos análisis de sangre se confirmaba que era diabetes de tipo 1 por tener un valor de anticuerpos antiGAD de más de 2000 (no recuerdo las unidades), cuando lo normal es no tener antiGAD. Eso quiere decir que mi cuerpo está creando esos anticuerpos que están destruyendo mis productores de insulina.
También me miraron otras cosas relacionadas con enfermedades autoinmunes. Cuando se detecta que tu sistema inmunológico hace alguna «trastada» como ésta, eres más propenso a que te pasen más cosas autoinmunes. Así que, me miraron marcadores para ver si era celiaca o si tenía problemas de tiroides. Afortunadamente, ambos salieron negativos, pero cada año me lo volverán a mirar porque ahora ya hay más riesgo de que algo vaya mal. Espero que salgan negativos todos los años, que con la diabetes ¡ya vale!
Otro valor que me miraron es el péptido C. Tenía un valor de 0.16 ng/dL (lo normal es entre 0.78 y 5.19). El péptido C te da una idea de los productores de insulina que le queda a tu organismo. Si la enfermedad se detecta pronto, es más probable que no todas las células beta hayan sido destruidas, y aun tengas la capacidad de producir algo de insulina. Si ese es el caso, tras empezar el tratamiento entrarás en lo que se conoce como luna de miel o fase de remisión. Es un período de tiempo en el que tus necesidades de insulina externa son bajas, porque tu cuerpo aun está aportando algo de insulina. Además, durante este periodo estás más controlado. Es más raro que tengas subidas y bajadas demasiado fuertes. Puede durar de unos días hasta un año. El valor del péptido C puede aumentar con el segundo análisis (tras llevar un tiempo con insulina), cuando cabría esperar que fuera menor. Lo normal sería que tu capacidad de producir insulina fuera disminuyendo lentamente porque tu cuerpo sigue atacando al páncreas, ¿pero por qué puede aumentar en el segundo análisis el péptido C? Tras empezar a inyectarte insulina, tu cuerpo deja de estar en ese estado de estrés al que estaba sometido con esos valores de glucosa elevados, y puede que algunas de las células beta de tu páncreas estuvieran aletargadas y hubieran dejado de funcionar, pero no estuvieran destruidas aun. Cuando empiezas con la insulina, tu cuerpo recupera la normalidad y estas células, aun sanas, vuelven a trabajar.
Yo entré en fase de remisión, y 4 meses después aun sigo en ella. Mi valor del péptido C tres meses después del diagnóstico fue de 0.61 ng/dL, ahí se ve esa pequeña «recuperación». No se puede estimar con ese valor cuánto tiempo más estaré en fase de remisión, aunque mi endocrino se la ha jugado y me ha dicho que en mi revisión de mayo ya necesitaré dosis de insulina mayor. Bueno, en mayo veremos si sus estimaciones son correctas.
Y el último valor importante que quiero comentar es la hemoglobina glucosilada. Este valor indica como ha ido el valor medio de glucosa en sangre en los últimos 3 meses. Lo normal es que este valor este entre 4.6 y 5.8%. Yo tenía un valor de glucosilada de 11.9%. Para llevar un buen control de la diabetes se considera aceptable un valor por debajo de 7%, por encima de ese valor los riesgos de complicaciones aumentan mucho. Aunque cuanto más cercano esté a 6% mucho mejor. Tampoco te recomiendan que sea mucho más bajo de 6% porque podría haber riesgo de hipoglucemias inadvertidas.
Así que tras esta primera consulta, me fui a casa con unos cuantos conocimientos médicos que a partir de ahora se van a volver bastante familiares en mi vida y con el objetivo de reducir la glucosilada hasta valores cercanos a 6%.